Ay ay ah!

cuando a mi ardiente boca
su dulce labio aprieta,
tan del placer rendida
que casi a hablar no acierta,

y yo por alentarla
corro con mano inquieta
de su nevado vientre
las partes más secretas,

y ella entre dulces ayes
se mueve más y alterna
ternuras y suspiros
con balbuciente lengua

Juan Meléndez Valdés

Necesito más días como estos y menos trabajo, llamadas y "quedadas informales" para una caña y charlar de asuntos varios...pero ahora tocan los asuntos varios y la Seminci. Es, esta semana, como una tortura, que en el fondo anhelas cada año. Hay torturas que se anhelan sin saber muy bien por qué...

runnaway

"Sólo se conocen bien las cosas que se domestican"

Le petit prince

Al llegar a Nueva York me aseguraron que la gente es socialmente inestable, que no mira a la cara, que aquello de crear vínculos sociales es realmente difícil por allí. Afortunadamente no he percibido ninguna de esas sensaciones que parecían ser axiomas.

Echo de menos el bullicio, las prisas, lo altísimos edificios, el viento, la luz nocturna, la sensación de estar rodeada de animales atados con una correa que, si se quitan el bozal, son capaces de hincar el diente por doquier...

Me gusta la posibilidad de llevar las riendas en esa situación. Es mucho más fácil de lo que imaginamos hacer que las personas se desinhiban con nosotros cuando estamos fuera de nuestro lugar "doméstico" habitual. La pena es no poder llevarnos con nosotros a algunos de los que nos rodean habitualmente...